- 31 julio, 2025
- Categorias: Fiscal, Opinión

La sucesión en la empresa familiar no es solo un reto de gestión y gobernanza: es también un desafío fiscal. Una planificación deficiente puede generar costes impositivos que comprometan la continuidad del negocio y la estabilidad patrimonial de la familia. En España, la normativa ofrece beneficios significativos para facilitar la transmisión de estas compañías, pero exige el cumplimiento de requisitos concretos.
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A continuación, te compartimos cinco recomendaciones clave que te ayudarán a enfocar correctamente la planificación fiscal de la sucesión en tu empresa familiar.
1. Aprovecha la exención en el Impuesto sobre el Patrimonio
La ley española permite que las participaciones en empresas familiares queden exentas del Impuesto sobre el Patrimonio, siempre que se cumplan ciertas condiciones:
- Que la empresa desarrolle una actividad económica real.
- Que el titular tenga al menos un 5 % del capital individualmente (o el 20 % junto con el grupo familiar).
- Que el socio ejerza funciones directivas y obtenga de ellas más del 50 % de sus rendimientos del trabajo y actividades económicas.
Este incentivo es clave para evitar una carga tributaria excesiva sobre el patrimonio empresarial y facilitar la continuidad generacional. Si quieres entender cómo aplicar correctamente esta y otras ventajas fiscales específicas para este tipo de estructuras, te recomendamos la lectura del artículo “Empresa familiar: beneficios fiscales que puedes aplicar”, donde abordamos los requisitos y beneficios en profundidad.
2. Planifica la sucesión para aplicar la reducción en Sucesiones y Donaciones
Uno de los instrumentos más potentes es la reducción del 95 % sobre la base imponible del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, siempre que:
- Se mantenga la actividad económica durante los diez años posteriores.
- No se transmitan las participaciones durante ese periodo.
- Se cumplan las condiciones de dirección y participación similares a las del Impuesto sobre el Patrimonio.
La planificación anticipada es crucial. No basta con dejar constancia de la voluntad de sucesión: es imprescindible organizar la estructura empresarial, definir el relevo y documentar adecuadamente el ejercicio de funciones directivas. En este contexto, resulta especialmente útil considerar estrategias patrimoniales que minimicen el impacto fiscal, como explicamos en el artículo “Impuesto sobre donaciones y sucesiones: cómo planificar una herencia para minimizar su impacto”, que aborda en detalle los aspectos clave de este proceso.
3. Revisa la estructura societaria y patrimonial
Antes de ejecutar cualquier transmisión, conviene analizar a fondo si la estructura actual de la empresa cumple con los criterios necesarios para ser considerada “empresa familiar” desde el punto de vista fiscal:
- Evita agrupar actividades patrimoniales (como el arrendamiento de inmuebles) con la actividad económica principal.
- Si existe una sociedad holding, asegúrate de que gestiona participaciones relevantes y cuenta con medios propios.
Una organización bien diseñada no solo aporta claridad, sino que evita perder beneficios fiscales por interpretaciones restrictivas de la Administración. En este contexto, el asesoramiento fiscal especializado en empresas familiares resulta esencial: permite identificar con precisión los elementos críticos que pueden condicionar el acceso a ventajas fiscales, optimizar la estructura societaria y adaptar las decisiones patrimoniales a los objetivos de continuidad y protección del legado familiar. Un análisis detallado y con visión a largo plazo minimiza riesgos y proporciona las herramientas necesarias para una transición ordenada y fiscalmente eficiente.
4. Valora las donaciones en vida como estrategia fiscal
Donar en vida puede ser una estrategia fiscal más eficiente que esperar a una sucesión por fallecimiento. Esta opción:
- Permite beneficiarse de la misma reducción del 95 % en el Impuesto sobre Donaciones.
- Evita, en determinados casos, tributar por ganancia patrimonial en el IRPF del donante.
- Aporta orden y previsibilidad a la transición generacional, reduciendo el riesgo de conflictos futuros.
Eso sí, este tipo de operaciones deben formalizarse correctamente para que surtan efecto legal y fiscal. Si estás considerando esta vía, te será de gran utilidad el artículo “Donación en vida: aspectos legales a considerar”, donde exploramos los elementos esenciales que debes tener en cuenta antes de donar participaciones empresariales.
5. Anticipa la liquidez y la fiscalidad indirecta
Al planificar la sucesión, muchas veces se pone el foco en los impuestos principales, como Sucesiones o Patrimonio, pero se pasan por alto otros costes que también pueden generar tensiones financieras:
- Gastos notariales, registrales y notarías.
- Impuestos indirectos, como la plusvalía municipal por la transmisión de inmuebles.
Planificar con tiempo te permite valorar soluciones que aporten liquidez sin comprometer el negocio, como la distribución previa de dividendos o la contratación de seguros de vida específicamente diseñados para cubrir contingencias fiscales. Estas decisiones, cuando se toman en el marco de una estrategia fiscal integral pensada para empresas familiares, marcan la diferencia entre una sucesión ordenada y una situación de urgencia.
Conclusión
Una sucesión bien estructurada desde el punto de vista fiscal no solo protege el legado familiar: garantiza la continuidad del negocio, minimiza riesgos y facilita la toma de decisiones futuras. Para lograrlo, es fundamental:
✔ Evaluar la situación patrimonial y societaria con criterios fiscales.
✔ Anticipar requisitos y documentación necesaria.
✔ Coordinar decisiones empresariales y familiares a largo plazo.
En este tipo de procesos, el conocimiento técnico es tan importante como la visión estratégica. Identificar a tiempo los posibles puntos de fricción con la Administración, interpretar correctamente los requisitos normativos y diseñar una hoja de ruta que respete tanto los intereses empresariales como los familiares puede marcar la diferencia entre una sucesión exitosa y una operación costosa.
Grupo JDA cuenta con una sólida trayectoria en el asesoramiento fiscal y patrimonial de empresas familiares. Entendemos las dinámicas particulares de este tipo de organizaciones, donde los intereses económicos se entrelazan con valores, generaciones y estructuras de propiedad complejas. Nuestro enfoque combina el análisis fiscal con la comprensión del negocio y la estructura familiar, ofreciendo soluciones a medida para cada etapa del proceso sucesorio.
Además de garantizar el cumplimiento normativo, ayudamos a definir estrategias que aseguren la continuidad de la empresa y la estabilidad del patrimonio familiar. Desde la reorganización societaria hasta la planificación intergeneracional, nuestro equipo acompaña a cada familia empresaria con cercanía, experiencia y visión de largo plazo.